Nace de la frase electric 4-wheel control FORCE y se refiere al control de torque en las 4 ruedas de manera independiente a través de la evaluación de la fuerza aplicada y/o requerida en cada uno de los rodamientos en acción
Enfocado en seguridad, al tomar una curva, el vehículo corrige el torque en cada rueda para evitar que el conductor se vea en la necesidad de alterar su estilo de manejo; esto permite que, a través de e-4ORCE, se mantenga un trazado ideal de circulación, independientemente de las condiciones del camino; es decir, sin importar si se trata de grava suelta, nieve o piso mojado, el sistema se mantendrá buscando evitar sobreviraje o subviraje de manera autónoma.
Esto se consigue gracias a los dos motores eléctricos –uno en cada eje– que determinan la potencia para cada punto de contacto con el pavimento. Al mismo tiempo, juegan un papel fundamental para la recarga de baterías mediante el frenado regenerativo al momento de desacelerar.
Esto logra disminuir considerablemente el efecto natural de chicote o de inclinación que los cuerpos dentro del vehículo sufren al momento de la frenada o arranque a consecuencia de la inercia. El concepto es muy simple y se basa en el planteamiento de la Primera Ley de Newton: Todo cuerpo en reposo o movimiento uniforme, permanecerá de la misma forma, si no es aplicada una fuerza sobre este.