Día a día cientos de personas usan todo tipo de apps desde sus celulares y eso significa que muchas han accedido a otorgarle una gran variedad de permisos a estas aplicaciones sin siquiera saberlo.
Para algunos programas es lógico que cuenten con acceso a ciertos elementos del teléfono, como WhatsApp a la cámara y el micrófono para que se puedan realizar videollamadas, pero en varias ocasiones hay permisos que muchos prefieren no otorgar a ciertas aplicaciones ya sea por seguridad o para que el dispositivo no tenga que trabajar más de lo necesario.
Los celulares que cuentan con sistema operativo iOS en especial tienen una interfaz que facilita el control de qué permisos son otorgados o no a todas las aplicaciones presentes en el dispositivo, de forma que los usuarios puedan estar al tanto de qué tanta información y de qué tipo están compartiendo con el software instalado.
Para conocer qué permisos exactamente están otorgados a qué aplicaciones basta con seguir unos pocos pasos:
- Entrar a la app de Ajustes
- Deslizarse hacia abajo hasta el segmento de Privacidad
- Tocar en Privacidad, lo que desplegará la lista de permisos disponibles
- Desde aquí se puede acceder a cada posible permiso
Una vez hecho esto, los usuarios tienen acceso a todas las diversas opciones que ofrece el dispositivo para el uso de las aplicaciones, de manera que cada individuo puede ajustar los niveles de privacidad de acuerdo con sus propias preferencias.
Posiblemente uno de los elementos que más le importan a la mayoría de los usuarios es la ubicación del teléfono mediante GPS.
En este aspecto varias personas prefieren tener un nivel bastante alto de control y los iPhone lo permiten mediante el apartado ya mencionado. Desde la configuración de privacidad es posible escoger qué apps tienen permiso tanto de conocer la ubicación del dispositivo como de rastrearlo, en el caso principalmente de aplicaciones de ejercicio.
A diferencia de lo que usualmente se podría pensar, las opciones no están limitadas a activar o desactivar el permiso.
Es posible otorgar distintos niveles de acceso, en la ubicación, por ejemplo, se puede escoger si las aplicaciones pueden saber siempre la locación del celular, si solo lo pueden hacer si el aparato lo pregunta cada que sea necesario o si nunca podrán tener acceso a esta información. De igual manera existe la opción de ofrecer una ubicación específica, a diferencia de las estimaciones aproximadas que ofrece el dispositivo de forma predeterminada.
Otro de los permisos que pueden ser de interés para aquellos usuarios inclinados hacia mayor control de su privacidad es el uso de la cámara y de la galería de fotos.
En este aspecto existe la interesante opción de limitar el acceso a solo una selección determinada de imágenes, de forma tal que el usuario puede escoger premeditadamente qué fotos son las únicas disponibles para aplicaciones de edición o también para redes sociales como Instagram, sin tener que dejar toda su galería completamente abierta.
Finalmente, la recomendación para todos los usuarios es revisar sus configuraciones y adaptarlas al estilo que les sea más allegado.
No todas las personas requieren del mismo tipo de privacidad en sus smartphones o simplemente sienten mayor comodidad con ajustes personalizados a su propia medida, así que lo más aconsejable es experimentar con las diversas opciones disponibles hasta encontrar un punto que sea el más apropiado para cada uno y así realmente sacarles provecho a estos teléfonos inteligentes.
Información de Infobae